Metagame, shmetagame

Saturday, October 11, 2014

4 Razones por las que las fetchlands son buenas.


En muchos aspectos, debemos reconocer que los jugadores de magic resultamos personas muy locas para los que se encuentran fuera del fascinante mundo del que ahora somos parte. 
Pero incluso para los que estamos adentro, es sorprendente como algunos jugadores de magic vemos como completos locos a otros por pequeñas diferencias de concepto, y Khans of Tarkir nos ha traído una situación que lo ejemplifica perfectamente.
Por un lado, los compañeros que recién están aprendiendo a jugar Magic no pueden entender cómo jugadores veteranos como yo chillan como colegialas cuando abren un booster de Khans of Tarkir y aparece una de las famosas fetchlands.  ¿Porqué están tan felices? Pudieron haber abierto un rinoceronte, una mantis, vamos, cualquier cosa menos una tierra que en realidad no da mana, que tiene que ir a ver una tierra básica (aburrido) y que además nos cuesta una vida por hacerlo.
Por otro lado, los que llevamos años jugando vemos la cara de decepción de un recién llegado abriendo una hermosa Polluted Delta y nos preguntamos qué diablos le sucede, como no puede apreciar el haber tenido tanta suerte en abrir una fetchland tan buena.
La locura se compone cuando subimos a una página especializada en cartas de magic a buscar los precios de las cartas y encontramos que la famosa Polluted Delta vale….20 dólares.
¿Qué diablos? ¿Qué tienen estas cartas que la gente está dispuesta a gastar el equivalente de una buena pizza familiar en una copia individual?
Es mi intención en este pequeño artículo explicar a los recién llegados porqué los veteranos somos tan dichosos en perder una vida por ir a buscar una triste tierra básica.

1.    El color que se necesita cuando se lo necesita

Esto debería ser bastante obvio: la diferencia entre una tierra básica y su correspondiente fetchland es que no deberíamos tener el problema de tener, por ejemplo, un bosque cuando lo que REALMENTE necesitábamos era una montaña, y viceversa.  En algunos casos esta diferencia no es tan importante, y en otras es un caso de vida o muerte.  Supongamos que estamos jugando una baraja rojo verde, no tenemos fetchlands y esta es nuestra mano:

Montaña, Montaña, Sylvan Caryatid, Sylvan Caryatid, Sarkhan the Dragonspeaker, Courser of Kruphix, Goblin Rabblemaster.

Como podremos notar, a menos que tengamos una suerte loca y encontremos en el siguiente draw un bosque, no tenemos nada que hacer y nos toca hacer mulligan.  Incluso una montaña no nos serviría para nada.
Ahora, cambiemos una de esas montañas por una Wooded Foothills.

De repente, podemos jugar Caryatid en segundo turno y courser en el tercero incluso si no volvemos a ver mana en algunos turnos más.  Una Wooded Foothills hace la diferencia entre una salida aplastante y un mulligan.

2.    Pone cartas en la tumba.


Una notable diferencia entre jugar una tierra normal y una fetchland es que la fetchland va a dar a la tumba.  Esto usualmente no es importante a menos que la tumba pueda convertirse en un recurso.  
Les presento a nuestro amigo Murderous cut:


El hecho de haber utilizado una fetchland efectivamente reduce el precio de Murderous Cut en una mana por el bajo, bajo precio de una vida. Y eso sin mencionar cartas de antaño, como la mecánica de Threshold o Grim Lavamancer.

 

Cabe anotar en este punto que una diferencia muy frecuente entre los veteranos y los novatos en Magic es que los veteranos parecen criminalmente dispuestos a perder vidas para jugar su juego. Este comportamiento fascina a los novatos, porque si la forma de perder el juego es quedándose sin vida, y los “veteranos” pierden vida sin provocación de su oponente, obviamente alguien no está entendiendo cómo funciona este juego.
Lo que sucede es que hace mucho tiempo apareció una carta llamada Necropotence:

 

Cuando alguien la usó por primera vez el primer torneo de magic competitivo de la historia, todo mundo se quedó impresionado porque no podían creer que alguien estuviera dispuesto a perder vida para hacer draw de cartas.  Cuando este galán empezó a ganar partido tras partido, la gente empezó a poner atención, y se dieron cuenta de que a veces en magic es mejor cambiar tus puntos de vida por otros recursos.   Después de una lección tan impresionante, los jugadores de magic crearon una famosa cita:

“En este juego, la única vida que realmente importa es la última”.


3.    “Adelgaza” la baraja.

Genial, ahora estos charlatanes nos quieren confundir mezclando la nutrición con el juego.  Déjenme les explico un poco…
Magic fue creado por un matemático, el Sr. Richard Garfield, y como tal, no puede ser ajeno a las realidades de la matemática, en especial a una de sus ramas más difundidas: La estadística.
La baraja de 60 cartas legal de un torneo plantea un problema estadístico modelado bajo la distribución hipergeométrica.
ADVERTENCIA: PÁRRAFO DE EXPLICACIÓN MATEMÁTICA, ABSTENERSE SI ODIA A ESOS NERDS DE LAS CALCULADORAS.
La distribución hipergeométrica describe la probabilidad de tener un número de éxitos k en un número n de eventos en una población finita sin reemplazos de tamaño N que contiene exactamente un número K de éxitos totales.
FIN DE PÁRRAFO ABURRIDO.
Ok…¿Qué diablos quiso decir eso?
 

La mejor explicación posible es un matemático jugando a las cartas. Tal vez estaba jugando póker y le salió una mano así:

10 de diamantes, 6 de corazones, Q de diamantes, K de diamantes, A de diamantes.
Si cambia una sola carta, ¿cuál es la posibilidad de que le salga la J de diamantes para tener una flor imperial, que es básicamente imbatible en este juego?
Para eso, tendría que considerar lo siguiente:
-    El total de cartas de la baraja (típicamente 52).
-    Las cartas que ya tiene en la mano (5).  Vamos a asumir que siendo matemático no tiene amigos y que está jugando póker contra la máquina o contra un casino (porque caso contrario habría que retirar también las cartas que los demás tengan).
-    El número de J de diamantes que quedan en la baraja (si la baraja es legal, queda uno).
-    Las cartas que puede cambiar (1).
En este escenario, hacemos los cálculos de la distribución hipergeométrica (o mejor aún, usamos una página de internet que nos haga el trabajo sucio) y obtenemos el resultado: Nuestro matemático antisocial tiene 2% de posibilidades de sacar una flor imperial.
Pero…que tal si le dan un diamante? Con eso tendría color, que no es una mano imbatible, pero es una mano muy sólida.  Ingresamos de nuevo los números en la calculadora y obtenemos un mucho mejor 17%.
Volviendo a Magic, y siendo este también un juego de cartas, podemos utilizar la distribución hipergeométrica para analizar nuestros decks.
Vamos a suponer que estamos jugando un partido de magic muy peleado, corriendo una baraja con criaturas pequeñas y mucha quema.  Hemos logrado dejar a nuestro oponente en 4 vidas, pero siendo el vil gusano que es nuestro oponente, tiene en la mesa una Elspeth, un Sarkhan y un Butcher of the Horde con lo que nos va a matar el siguiente turno sin que nada nos pueda salvar. 
Lo único que nos permitirá ganar es que del tope de nuestra librería salga un Stoke The Flames.  Cual es la posibilidad de que un Stoke the Flames nos salga en el siguiente draw?

 

Vamos a asumir que ya no tenemos nada en la mano, nos mataron todo lo de la mesa, y hemos en total utilizado 10 cartas.  Esto nos deja un total de 50 cartas.  Si no hemos sacado ningún Stoke the Flames, la posibilidad de sacar uno es de 8%.
Pero que tal si es que en lugar de usar tierras normales, dos de nuestras tierras fueron fetchlands?
Entonces el total de cartas de la población restante ya no es de 50, es de 48, lo cual nos da una posibilidad de 8.3%.  Si en lugar de eso hubieran sido 3 fetchlands, la posibilidad subía a 8.5%.
Ahora, medio punto porcentual no parece mucho, pero si pudieran escoger entre el 8% de posibilidades de irse a jugar un Pro Tour a Francia, y un 8.5%, cuál preferirían?
Mientras mejor se juega magic y mejores son las barajas, los ganadores ganan cuando controlan esos pequeños porcentajes.
Como pueden notar, la sola existencia del análisis por medio de la distribución hipergeométrica explica por qué jugamos 60 cartas y no 61, por qué tratamos de usar 4 copias de todo , por qué es tan importante hacer muchos draws y porqué mecánicas como Scry son tan útiles.

4.    No sólo trae tierras básicas.

Si se fijan bien en el texto de las fetchlands, por ejemplo, Windswept Heath, dice:
“Busca tu librería por una carta de Bosque o Planicie  y ponla en el juego”.
Obviamente, lo que normalmente buscaríamos –y lo haremos en formato estándar- es buscar una tierra básica.  Pero en ningún lado de esa línea dice que tienen que ser tierras básicas.
“Pero hermano, dice claramente Bosque o Planicie, acaso hay cartas aparte de Bosque y Planicie que cumplan estas condiciones?”
Bueno…

En alfa salieron tierras que tenían 2 tipos básicos, como por ejemplo Tundra, que es al mismo tiempo una isla y un pantano.  Esas tierras ahora cuestan cantidades absurdas de dinero y Wizards posiblemente nunca más las reimprima porque eran ABSURDAMENTE poderosas.
En el bloque anterior teníamos las famosas “Shocklands”. Steam Vents por ejemplo es una Isla y una Montaña al mismo tiempo, pero para destaparlas la primera vez hay que pagar 2 vidas.

 

En Shadowmoor tuvimos un ciclo de tierras comunes que hacían más cosas que dar mana, y eran de tipos básicos, un ejemplo es Sapseep Forest.

 

Por último, dos tierras muy especiales son Bosques normales: Dryad Arbor (que es un bosque y una criatura 1/1 al mismo tiempo) y Murmuring Bosk, un “Bosque” que puede darnos mana negra o blanca pagando una vida.

 

Todas estas tierras pueden buscarse con una fetchland.  El poder de garantizar que en el primer turno tienes no solo la mana del color que se necesita, sino dos o más colores que podrían necesitarse es increíblente poderosa y muy frecuentemente utilizada en formatos más amplios que Standard, como Modern o Legacy.
Espero que con esta pequeña introducción quede más claro porqué las Fetchlands son tan apreciadas, tan buscadas por los jugadores y tan frecuentemente utilizadas en todos los formatos.  Con eso dicho, no siempre es bueno usar todas las fetchlands posibles, porque a veces pagar demasiada vida por tener acceso a mana puede costarnos el partido –imaginense buscar 4 tierras y que nuestro oponente no tenga otra cosa que cartas de quema. Hay que alcanzar un balance, pero la primera vez que usen una fetchland para tener justo lo que querían,  justo cuando lo necesitaban, créanme que van a sentirse muy bien.

Monday, October 04, 2010

Como evitar convertirse en The Rembrandts: Reporte de Nacional (1ero)

Cuando me encontraba en uno de los tantos recesos entre rondas del nacional recientemente efectuado en Quito, me encontré con José Intriago, en ese momento campeón defensor. Conversamos un rato, y aunque no recuerdo sus palabras, me parece que dijo algo parecido a “quisiera ganar de nuevo el nacional, porque parece que todos fuéramos one-hit wonders”. Dos cosas pasaron por mi mente:

  1. Counting Crows (que no era justo, porque a decir verdad tuvieron más canciones buenas que Mr. Jones). La comparación correcta es The Rembrandts, de los cuales nunca he oido otra canción que no sea “I'll be there for you”.

  2. Cuanta razón tenía José. Si creen que ganar un nacional es difícil, ganar dos es una odisea.

Debo decir aquí que una de las formas más seguras de perder un nacional es obsesionándose con ganarlo, la única forma que he encontrado para llegar a esta posición es evitando la idea del campeonato nacional para enfocarse en un match, en un juego y en cada jugada individual. La ansiedad de estar cada vez más alto en la tabla de posiciones de un torneo puede echar al traste con cualquier aspiración de llegar inclusive al top 8.

Así que con esto dicho, ¿Cómo lo hice?

  1. Preparación para lo impreparable.

Casi toda preparación para cualquier nacional va a empezar el segundo después de que ha terminado el anterior. Los bloques rotan, las barajas cambian, los conceptos fluyen. La crisis más grande que tuve en el juego me llevó a un replanteamiento que me convirtió en un estudioso de los estilos de deck agresivos, sobre todo, de los decks monorojos. Tomé como misión demostrar en los torneos locales que monorojo no es, como se piensa con frecuencia, un deck “tonto” que puede ser manejado por cualquiera, sino que es una construcción de precisión matemática que castiga cada error de forma severa. Los últimos 2 nacionales he llevado a top 8 construcciones rojas agresivas. Todo esto estaba muy bien, pero empecé a ver que ya había dejado claro mi punto y que era hora de tomar otros caminos hasta que decidí que jugaría cualquier cosa excepto por monorojo.

En principio jugaba con Naya y me iba bien: tuve la fortuna de que mis cambios me permitieron armar prácticamente idéntica la lista de Boss Naya (justo después del lanzamiento de Worldwake) y gané varios torneos con este deck, que también fue piloteado con éxito en construcciones similares por Jaime Coba, Santiago Larreátegui y Pancho Arcos. Cuando esto empezaba a suceder, me di cuenta de algo por demás curioso: todos estábamos preparados para Jund, también conocido como la Gran Amenaza al Metajuego Mundial ®, pero nadie estaba jugando el deck. Mis Sprouting Thrinax pasaban empolvándose en mi carpeta y el único que parecía querer jugar el deck (cuando no lo dejaba de lado por su amado Bant) era Daniel López. Estábamos cayendo en el ridículo de prepararnos contra un deck que era una amenaza mundial y no tenía ninguna presencia local.

Como era lógico, decidí armarme una lista Jund y averiguar porqué el escándalo.

Durante el primer mes, fui un desastre. Perdía con todo y parecía que el deck mismo estaba maldito. Me inundaba de tierras, o me quedaba con 3 Bloodbraid Elf en la mano mientras jamás llegaba a la 4ta mana. Estaba totalmente dispuesto a dejar el deck, pero decidí seguir intentando jugarlo por orgullo. No me entraba en la cabeza que Pros alrededor del mundo jugaran el deck con buenos resultados todas las semanas y yo no pudiera ni ganar un triste FNM con una lista casi completa (aunque debo acotar que por mucho, mucho tiempo, tuve que jugar con un solo Maelstrom Pulse).

Decidí darle al asunto un mes más de oportunidad, respiré, conté hasta 10 y traté de jugar más enfocado. Empecé a notar las sutilezas de la construcción; como a veces Jund jugaba como un deck terriblemente agresivo y otras veces se dedicaba a controlar la mesa y a ganar con una amenaza imparable. De a poco fui levantando hasta que empecé a ganar consistentemente FNM's con Jund. Más o menos en esta época decidimos juntarnos con los amigos de la casa del Chino para armar lo que posteriormente llamaríamos como el Equipo Vuvuzela (era el mundial, estaba de moda y sonaba bien. Que la historia nos juzgue con levedad).

Dentro del equipo mismo me convertí en “el man del Jund”. Varios decks se estaban armando entre todos, y como sabían que yo tenía una lista Jund bastante funcional, me pedían probar contra el infame deck de los 4 blightnings y las 4 elfas. La verdad es que una y otra vez pude comprobar que Jund era un deck especializado en romper corazones, diría incluso hasta de forma áspera. El deck no recurría a ningún recurso sofisticado, a un combo bonito o a una criatura legendaria con arte fan-service para ganar, sino que hacía las cosas de forma horriblemente efectiva: 2 blightnings seguidos, cascade en removal, tokens de saproling que seguirían golpeando junto a manlands cuando el wrath se intentase jugar... esa lista Jund destruyó mas de una idea de deck, y más de un miembro del equipo tuvo palabras irrepetibles para la lista maldita.


La lista resistió a la llegada de Rise of the Eldrazi, y muchos pensaron que con la impresion de Obstinate Baloth en M11 el arquetipo estaba a las puertas de la muerte. Y sin embargo el “rompecorazones” seguía funcionando. En ese punto sabía que llegaría al nacional con una lista Midrange, pero no estaba seguro de si sería Jund o Naya (que en este punto estaba jugando 4 Vengevines, haciéndose más caro que un iPhone comprado aquí).

Al acercarse la fecha del nacional dos cosas aparentemente contradictorias se hicieron obvias: Jund estaba en declive, pero las listas jund estaban diversificandose tanto que se hacían irreconocibles. Había junds agresivos, junds de control, junds con Eldrazi Temple, junds con 8 descartes maindeck, junds sin planeswakers y con Plated Geopede. En este punto decidí empezar a cambiar las últimas cartas que me faltaban para armar Jund, porque jamás conseguiría los 4 vengevines a tiempo y porque con esa diversificación, decir que iba a jugar Jund era como decir que iba a jugar con 60 cartas: no decía nada realmente comprometedor ni revelaba ningún “tech” impresionante o algo que se le parezca.

Ya tomada la decisión, mi lista estaba prácticamente terminada, y las pruebas con el equipo habían determinado que podía ganarles a todos los decks (aunque a ninguno de forma aplastante) excepto por dos exceptiones notables: Monorojo y monoblanco (ya fuera soul sisters o cualquier cosa que llevara pulgas blancas agresivas). En el primer caso me mataban antes de poder tomar el control, y en el otro tenía problemas con criaturas de protección.

Toda la semana anterior al nacional pasé atormentado sobre la decisión de jugar Jund, y al despertar el Jueves de esa semana, tuve una epifanía estilo Dr. House: las cartas sueltas de mi construcción no hacían más consistente al deck, sino más espectacular. Y yo siempre he considerado que para torneos grandes la consistencia siempre le gana a la rapidez. En la lista llevaba 1 Sarkhan the Mad, 1 Crystal Ball y 1 Garruk Wildspeaker. Después de mucho pensarlo decidí dejar en sideboard al Loco y a la pelota, considerando que Garruk sigue siendo una de las mejores cosas que un deck verde puede jugar en 4to turno, pero decidí mudar al maindeck a 2 Obstinate Baloths, considerando que mejoraban mis dos peores pesadillas con monorojo y monoblanco. También decidí que remataría el deck con 2 Siege-Gang Commanders, porque tanto los Grave Titans como los Broodmate Dragons costaban 6, que contra los decks “monos” era a veces un turno muy tarde.

Mario Castillo: Stupid Jund

4 Putrid Leech 4 Raging Ravine
4 Sprouting Thrinax 3 Dragonskull Summit
4 Bloodbraid Elf 3 Verdant Catacombs
2 Obstinate Baloth 1 Lavaclaw Reaches
2 Siege-Gang Commander 1 Rootbound Crag

4 Lightning Bolt 1 Terramorphic Expanse
4 Blightning 4 Savage lands
3 Maelstrom Pulse 4 Mountain
2 Terminate 3 Swamp
2 Bituminous Blast 3 Forest
1 Jund Charm
1 Garruk Wildspeaker

En cuanto a preparación para el draft, debo decir esto: M11 no es ciencia avanzada. Es un set básico. Yo seguí 3 reglas básicas para el draft de M11 y sabía que mientras las siguiera, terminaría al menos 2-1 en limitado a menos que una tragedia de magnitud bíblica sucediera:

  1. Criaturas, criaturas y más criaturas

  2. Mantener curva, y

  3. Alejarme de negro a todo costo.

Esa última regla puede ser muy ridícula considerando que en los últimos torneos grandes de draft alrededor del mundo se estaba ganando con decks negro/rojo y que se considera que el mejor deck de draft existente en m11 es negro/azul, pero yo tenía el problema crónico de coger demasiada remoción condicional en negro y las criaturas negras en M11 son simplemente malas. Mis decks de draft con negro sencillamente no funcionaban y cuando me alejé de draftear negro empecé a ganar torneos.

Esa fue la preparación. Ahora a la acción:

Primera ronda: Juan Proaño (Buda) con Monorojo.

Para cuando llegué al tropiburguer, pensé que mis “inspiraciones” estaban infundadas. Monorojo era un predador declarado de Jund, y Jund estaba desapareciendo. Para cuando pasé la lista estaba prácticamente arrepentido pensando que de gana puse los Baloths en main, porque seguramente ningún monorojo asomaría en el camino.

Me toca el primer juego con el Buda, al cual era grato verlo a los años, pero no podía evitar pensar en qué estaría jugando. Rodamos el dado, me gana (como pasó casi todo el torneo) y sale primero...

Con una montaña, diciendo dale.

Mala cosa.

Pongo mi Savage lands tapada (la poderosísima salida de primer turno de Jund ®) y a final de turno, lightning bolt a mi.

Monorojo, maldición.

El juego se convierte en lo que debe: una lucha de monorojo por matarme y de Jund por dominar la mesa. Aquí debo acotar que muchos jugadores de Jund no atacaban por miedo a los hasters de monorojo. Sus miedos están bien fundados, pero si no le atacan a monorojo, la derrota es segura. Detengo en algo el sangrado resolviendo un par de Blightnings no consecutivos, tengo la fortuna de tener en reserva Lightning Bolts para el ocasional Ball Lightning, y termino atacando por letal cuando me quedaban sólo 4 vidas.

Del sideboard vino el último Baloth, el Jund Charm extra (que fue una maravilla todo el torneo y el crédito se lo merece Daniel López por no haber quitado esos bebés de main cuando todo el mundo decía, cito, “el López es loco”) y la Malakir Bloodwitch (porque joder, cada vida cuenta). Y salieron los pulsos. Alguien me dijo que sacar los pulsos en el segundo partido era mal plan porque monorojo mete Leyline of Punishment y anula los baloths. Si ellos quieren meter una carta que no hace más daño, no ataca y tampoco defiende, bien por ellos.

En el segundo juego hubo muchos goblin guides, mucha quema y pocos Baloths.

En el tercer juego el plan sale relativamente bien, aparece un blightning de 3er turno y un Baloth de 4to (que causa muecas de estrés en el Buda). Baja también para ayudar en la lucha Garruk (poniendo una bestia) y utilizando mis fantásticos poderes Jedi, hago que el Buda dirija un Staggershock a Garruk, matándolo de contado, pero dejándome en una vida, lo cual es suficiente para que mis bichos verdes terminen el trabajo. También debo anotar que fue algo afortunado que no haya conseguido la 4ta Verdant Catacomb a tiempo para el torneo: si la hubiera usado en este juego, hubiera empezado perdiendo.

Me siento aliviado de haber ganado uno de mis matchups más difíciles, con la casi certeza de que no volvería a encontrar un mono-rojo en el camino....

1-0-0

Segunda Ronda: Santiago Yerovi (Monorojo).

¿Qué es esto, una burla? No sólo me toca otra vez mi peor matchup, sino que me toca contra un compañero de equipo. Ya nada, a barajar de nuevo....

Santiago pierde un poco la compostura cuando bajo en 4to turno un Obstinate Baloth.

El: “¿Estás corriendo esas cosas en main?”

Yo: Sonrisa de gil.

El monstruo grande que pisa fuerte eventualmente llama a sus amigos y el juego termina con varios bichos entrando al área roja.

Mismo sideboard de la última vez, y el va primero (nunca bueno para la salud de Jund). Curiosamente no hay acción hasta 3er turno, cuando cae un Ball Lightning al que no tardo en tostar con un Lightning Bolt. Bajo una Putrid Leech y el baja el segundo Ball Lightning que yo quemo con el segundo Lightning Bolt. Al siguiente turno santiago baja el TERCER Ball Lightning, que destruyo con el TERCER Lightning Bolt. No creo en la suerte, pero de que soy lechón, soy lechón. Luego de mi lado bajó el famoso Baloth y el resto fue anecdótico.

2-0-0

Tercera Ronda: Andrés Olmedo (Pyromorph).

La verdad no había probado contra este deck, una vez jugando monorojo me jugaron Pyromancer Ascension y me dieron la del zorro. Decidí hacer lo que jund hace y ver que pasa.

En primer partido hubo varios elfos y blightnings y criaturas de mi lado y una notable ausencia de Time Warps del otro. Tal vez haya destruido algún Ascension con un pulso, pero mi memoria es frágil.

Al segundo partido decido arriesgarme y “pagar el bluff” de pyromorph: asumo que en el segundo partido va a transformarse en polymorph, así que decido sacar a Garruk, los bituminous blast y los Commanders para meter remoción como instante y esperar sabotear el plan macabro de polymorph al token.

Salgo segundo con una mano que contenía al poderoso Jund Charm -en este momento crítico porque podía limpiar la tumba de hechizos para el Ascencion o matar como instante a cualquier número de tokens a punto de ser transformados en Emrakuls- pero sé que necesito de alguna forma hacer creer que no estoy preparado para la transformación a Polymorph. Así que decido no jugar nada en los primeros turnos, bajando taplands (aunque tenía en mano dos blightnings y una fetchland) y haciendo gestos de “que fue deck, necesito algo YA”. Efectivamente, al final de mi 4to turno, Andrés pone un token Eldrazi y en su main phase, después de quedar viendo lo que yo trataba fuese un rostro de becerro a medio morir, juega Polymorph al que yo respondo con Jund Charm en modo piroclasmo. Sonrío, destapo y mis turnos fueron Blightning, Blightning y Bloodbraid Elf en Thrinax.

3-0-0

Games & Games, además de organizar el nacional más barato de la historia, puso el almuerzo en el mismo Tropi Burguer. Una vez más felicito a una organización magnífica.

Con suficiente glucosa y unos meses menos de vida gracias a la Salsa Alemana, es hora de hacer draft. En general fue muy bien llevado -y a pesar de esto el pod 4 se confundió más de una vez- aun cuando debo reconocer que en la presión y los nervios del asunto, no sacar la tierra y/o el token al abrir el booster era un error muy fácil.

Mi primer booster me ofrece un Stormtide Leviathan, caro, pero debo reconocer que hace bien su trabajo, y siendo azul el mejor color de m11 decido darle una oportunidad. En 2do pick veo al siempre eficiente Air Servant y siento que tal vez azul tiene chance, pero no veo todavía el segundo color. Con Garruk Packmaster de 3er pick sospecho que tal vez pueda jugar verde, pero me pasan un Jace's Ingenuity, que cojo con gusto. Y luego vienen water servant, Aether Adept, Azure Drake, Foresee...un Ice Cage de como 11avo pick me hace sospechar que no hay mucho draft azul en la mesa.

El segundo booster me presenta con un Platinum Angel, que decidí llevar porque en cualquier caso prefería verla en mi sideboard que del otro lado. Y el desfile de azul seguía: Water servants, ice cages, diminish, Maritime Guard, más Azure Drakes, otro Aether adept. Me voy dando cuenta que el verde se está secando y que no tengo nada en otro color que valga la pena, así que decido botarme de cabeza, olvidar los otros colores y hacer algo que nunca he hecho en un draft: un deck monoazul.

En el tercer booster viene una Phylactery Lich que dejo pasar a cambio de una wall of frost para no ser atropellado por abajo. Tengo terror por la curva, así que empiezo a coger cualquier cosa en puntos bajos de curva, de preferencia, que ataque y defienda. Cojo 3 Scroll Thief sólo porque cuestan 3 y talvez algún rato me den una carta. Grande es mi sorpresa de encontrar de late pick un Merfolk Sovereign que convierte a mis thieves en amenazas verdaderas. Por ahí remato con una harbor serpent que es obviamente inútil para la mesa y un monstruo en mi deck y recojo un Augury Owl y un par de unsummons, por si acaso. Debo anotar que me pasaron 2 Jace's ingenuity más que no cogí porque verdaderamente quería criaturas en costo 2 y 3 que hicieran cualquier cosa.

2 Aether Adept
1 Air Servant
1 Augury Owl
2 Azure Drake
1 Harbor Serpent
1 Maritime Guard
1 Merfolk Sovereign
3 Scroll Thief
1 Platinum Angel
1 Wall of Frost
2 Water Servant

1 Diminish
1 Foresee
2 Ice Cage
1 Jace's Ingenuity
2 Unsummon

17 Islands

Tengo un deck monoazul de buena curva, con finishers, juego temprano, el ocasional combo simpático y consistencia. Esto va a ser muy bueno o muy malo.

Cuarta Ronda: José Intriago, Blanco-Rojo

No estoy seguro si el deck era Blanco Rojo, porque casi todo el deck era blanco, aparentemente no fui el único que tomó decisiones radicales. Aunque gané 2-0 fue posiblemente el partido más difícil de todo el torneo, porque enfrentábamos verdaderos titanes por el aire. Curiosamente en el segundo juego no perdí porque cometí un error: estaba concentrado en atacar con mis 2 Azure Drakes porque José no tenía defensa aérea y me confundo, atacando con un Azure Drake y un Aether Adept muy mal preparado para el combate. José enseña a volar a uno de sus monstruos terrestres, bloquea a mi Drake, en mi desesperación juego mal un Diminish y pierdo 3 cartas en un combate desastroso...

...Pero me quedé con un bloqueador por aire para detener al receptor de un armored ascension del segundo turno. José no puede atacar por todo, eventualmente estabilizo, el unsummon me libra del Ascension y eventualmente gano en el combate aéreo.

4-0-0

Quinta Ronda: Johann Zeller Blanco/Verde/Rojo

Me preguntaba porqué un deck Blanco Verde tan consistente tiene rojo hasta que un Fireball se libra de uno de mis pobres drakes. Pero como nadie deja pasar fireballs tan fácil, sabía que no habría más y el resto de mis voladores terminaron el trabajo.

En el segundo juego parecía tener la mesa controlada, siendo la única amenaza real una Yavimaya Wurm que en el peor de los casos sería bloqueada por un Aether Adept. Overwhelming Stampede hizo el sacrificio de mi adept inútil y mi vida un recuerdo.

En el tercer juego, una vez más, uno de mis drakes es bien cocido por un Fireball. Sabiendo que no hay más Fireballs, decido bajar mi carta maestra: Platinum Angel. Johann decide dar por terminado el partido al ver que el siguiente turno estaba muerto por aire, y decide ver su topdeck:

Plummet.

“Pero bueno, ya no tenías más fireballs”.

“Tenía 2 más”.

“...”

5-0-0

Hora de ver las tablas: voy primero, y con un empate soy inalcanzable y prácticamente se garantiza el pase al top 8 de mi oponente. Le ofrezco el trato a Jorge Enríquez, el cual decide aceptar, y conjuntamente decidimos prepararnos mentalmente para el top 8 en el Juan Valdez con sendos cafés bien azucarados.

5-1-0

Podría mentir y decirles que no tuve nervios al empezar el top 8. Mentiría. En ese momento todos los matchups parecían malos, todos los oponentes eran pros y toda barajada era insuficiente. Y me tocó el Pro por excelencia, don Emilio Gaete, jugando ni más ni menos UW control, un deck contra el que había probado poco (porque ODIO probar contra decks de control).

Cuartos de Final: Emilio Gaete (UW Control)

El primer partido fue un intercambio relativamente predecible: putrid leech, mana leak, blightning, 2 cartas al bote, Bloodbraid Elf que revela un inútil Pulso pero que igual ataca por 3. Se filtran algunos bichos más a través de los counterspells y parece que el deck de Emilio no estaba colaborador.

Jaime Coba me enseñó que en el partido contra UW control lightning bolt es prácticamente inútil, así que salen, al igual que los bituminous blast para permitir la entrada de los duress y los Goblin Ruinblasters.

En el segundo partido una vez más la Leech de segundo turno se encuentra un counterspell, pero de ahí se resuelven 2 Blightnings y una Bloodbraid Elf que reveló OTRO blightning (trayendo el “habla sherio” de Emilio). A veces un jugador de control sin cartas en mano puede hacer un topdeck salvador, pero esta no es esa vez.

Semifinales: Jorge Enríquez (Monogreen beats).

Los que empatan para entrar a top 8 están con frecuencia condenados a encontrarse en las llaves, y Jorgito llegó a top 8, una vez más, con una construcción verde de creación propia, como no puede ser de otra forma de parte del gran maestro verde del equipo Vuvuzela.

Ambos partidos fueron bastante similares: monoverde bajando bichos, Jund bajando bichos que traían removal al bajar o dejaban descendencia al morir. Al final la avalancha tricolor termina empujando a los valerosos defensores verdes.

Final: Jaime Flor (Jund).

Y eso que jund estaba en declive...

Como anécdota cabe señalar que Jaime hizo todo lo posible para engañar a todos los que lo conocían para hacerlos creer que jugaría cualquier deck menos jund, y hasta ahora, el plan parecía rendir frutos.

El primer partido se llevó al cabo como debía en un mirror jund: intercambio de blightnings, elfos trayendo cosas, criaturas muriendo. Después de mucho empujar, Jaime consiguió estabilizar la mesa a su favor, quedando en 3 vidas en el proceso. Debí soportar 2 turnos de tierra hasta que salió el Lightning Bolt salvador.

En el sideboard decido tomar el plan que había ensayado para el mirror:

  • Afuera los blightnings, nada de Baloths gratis para mi oponente, en su lugar, entran duress.

  • Saco uno de los siege-gangs, el solitario Jund Charm y una tierra (esto arriesgado) para que ingrese el último pulso y la única Crystal Ball, en caso de que el juego degenere en atrición.

  • Decido también bajar la curva del deck sacando los bituminous blast y trayendo los Ruinblasters, por supuesto, junto al último Baloth.

El segundo partido muestra 2 acercamientos distintos al mirror. Las hostilidades son empezadas en el 5to turno de Jaime al bajar una bloodbraid elf que trae en cascada a un Ruinblaster que, para mi suerte, no puede entrar con kicker. Ambas criaturas entran a la zona roja tan sólo para que les caiga un rayo a cada uno.

En mi cuarto turno bajo un ruinblaster que esta vez, si entra con kicker, despachando una manland del otro lado y quedándose destapado, por si acaso.

Jaime baja otra manland más, baja otro elfo y hace cascade en Lightning Bolt, que decide enviar a mi cara para atacar al elfo, al que detiene con su propia vida el Ruinblaster.

En mi turno bajo otro ruinblaster con kicker, destruyendo otra tierra más y volviendo al ataque.

Me parece recordar que del otro lado asomó una leech a la que le jugué un pulso, no recuerdo bien. De mi lado bajó el poderoso Baloth, dándome 4 nada despreciables vidas. También hice draw de un duress, que sin tardanza jugué, para encontrarme que Jaime escondía un blightning (!) y un Slave of Bolas (!!). A todo esto yo tenía otro baloth en la mano, y decidí no jugarlo, sabiendo que Jaime en algún punto se sentiría presionado y jugaría Blightning. Descarté el Slave of Bolas que podía ser una tragedia y cedí el turno. Efectivamente Jaime jugó el blightning, privándome de un Maelstrom Pulse y viendo con pesar la entrada gratuita de un Baloth. Eventualmente un terminate mataría a uno de mis baloths y el segundo slave of bolas despachó al segundo, pero en ese momento yo estaba atacando con un par de criaturas más y una manland. La presión fue insostenible y eventualmente Jaime no tuvo más que extender la mano.

Props:

Gracias a todos los vuvuzelas; JJ, Chino, Zort, Santi, Jorgito, Pau, Gabo, Lucho (Hello Kitty del Infierno). Ojo que después del nacional ya incorporamos al equipo a Viviana, y van a oír de ella por mucho tiempo.

A Jaime Coba, Daniel López, al Shao y en general al equipo Buseta por enseñarme a jugar estos formatos a las malas.

En general a la organización, con énfasis en Duván Torres y Barry Swan, un gran organizador y un gran juez.

Slops:

Al pobre hdp que se le robó al JJ el celular y el deck de limitado. El mundo da vueltas y te hemos de encontrar.

Nos vemos en un año, espero llegar a Japón y traerles recuerditos.

Mario.

Tuesday, June 26, 2007

Yo opino...

El otro día le dije a la Tati que es una especie de ley natural que la gente, en general, hace 3 cosas mal:

-Manejar
-Hacer el amor
-Draftear

Por supuesto, como no puedo ser juez y parte, le dejo al gran público que me califique el primer punto, a las damas el segundo y al entorno Magic el tercero. Por mi parte y respecto a mi entorno prefiero dejar el segundo punto en el aire (:P) , en cuanto al primero no puedo hacer mucho (:S) pero del tercero si puedo hablar y creo que en general, los panas de Quito que hacen draft lo hacen bastante bien. Siempre se puede mejorar claro...

Y estoy feliz de que yo lo estoy haciendo bien, al fin, otra vez ^^.

Dragonmago Out

Wednesday, June 20, 2007

I wonder....

Buenof, hoy probé mi gruul contra dragonstorm, configuración main, y me zorrearon, 8-2. Hasta ahora tengo un 50-50 contra un deck anti aggro y un primer partido abismal de malo contra dragonstorm.

...

Quiero saber todavía contra lo que quiero probar (calculo que probaré contra un deck de control y uno aggro más) pero dependerá muy de los resultados. Quisiera tener al menos un deck más para probar, y esa es la vaina. No creo que armaré otro deck aggro, estoy prácticamente convencido de tener el mejor deck aggro del formato (A MENOS QUE se me ocurra probar rakdos).

Combo o control? El deck más potente de combo es Dragonstorm, y estoy casi convencido de que no llega en torneos largos a menos que tenga un piloto muy competente, y no estoy seguro de ser ese piloto. Aprender a ser un piloto de control? Proxear, como que ya, Dragonstorm y salir a buscar bronca?

No lo se todavía.

Mañana quiero probar todavía, tengo 2 meses. 10ma sale en menos de uno. Dragonstorm pierde sleight of hand aparentemente. Gruul no es un mal caballo. Pero todavía no estoy decidido sobre mi montura....

Thursday, June 14, 2007

Probando en nacionales.Dia 1

A las buenas o a las malas, he empezado un proceso de prueba de decks para nacionales. Trataré de ser breve y conciso.

Gruul vs. Blinking Snake
(No SB)

Resultado final: 5-5

No es tan mal resultado para la causa gruul, considerando que blinking snake parece tener suficientes armas para detener aggro en seco -aun cuando podría incluir WOG. Comentarios precisos para el juego:

- Para ellos, bajar pollo de primer turno puede ser letal.
- Por otro lado, Wall of Roots de segundo turno contra nosotros es malo, malo malo.
- SI se pierde con la rotación del monito, aunque el fanático da ventaja contra cualquier cosa que juegue elfos.
- Tal vez contra este deck sería buena idea poner todo bicho que venga, al menos en primer juego.
-Stupid Elephant.

Consideraciones deck

Sulfur elemental main?
Rain of Gore side, tal vez sobre todo si hay mucho elefante


Tarea de cartas:
-Magus of the moon, blood moon en su defecto, algo.
-Los 2 char, soon.
-Las tierras, blah blah blah.
-Tarmogyf?

Por ahí probaron Blink Riders vs. MGA. como 7-3 para blink riders. MGA ya no es fashion? No asoma en los regionales (blink tampoco :P) en cualquier caso, Blink perdía cuando le bajaban la ledgewalker. Buen dato.

En cuanto a los regionales, gruul parece bueno, todavía, mmmm.......

Deck simple y al punto, todavía me parece buena idea.

Saturday, June 02, 2007

El baile del mono macho


"... while there are wrong answers, there are no wrong threats."
-David Price



Pues bien, una vez que el diagnóstico de los decks agresivos en nuestro metajuego local dictaba que el aggro estaba muerto, el Pancho y yo decidimos aprovechar el hecho de que un metajuego que se jacta de haber matado a aggro por completo es justamente el que menos espera su regreso triunfal.

Para cerrar con broche de oro las buenas participaciones FNM del Pancho con su Mono verde aggro, yo pude llegar a la final del viernes con buen viejo gruul, estilo Heezy Street clásico. Ante los insistentes rumores del acercamiento de dredge the bridge y del levantamiento de Project X como posibles decks nivel 1, sin contar con el actual dominio de los decks de control sobre el Standard local, decidí que mono de primer turno, mauler de segundo y elefante de tercero era el plan correcto.

Y no me fue nada mal, aunque parezca imposible, Gruul ha mejorado aún más como deck desde sus días de Grand Prix Honolulu.

Mi versión tenía 2 aportes propios -bueno, uno semipropio y uno totalmente autóctono.

Sudden Shock

2 Sudden shock main, y no saben las veces que me sacaron de aprietos. En la semifinal sudden shock limpió del mapa a una Saffi Eriksdotter, y dado el split second, el pobre Daniel no pudo poner en stack su chord of calling por 4 para traer a Crypt champion, teniendo que hacerlo por 3 para traer a Teysa, la cual moriría en dos turnos más atacada por elefantes tras elefantes. También eliminó un bloqueador clave en un partido en el cual me esperaba una serie de counterspells que no pudieron hacer más que aplaudir.

Esta adición la he visto ocasionalmente en decks gruul, como complemento contra control y contra ese viejo némesis de gruul, martyr of sands.

Timbermare


El caballito de tributo ^^ (Lovely Mare, te recordamos =) ). Este aporte al deck es exclusivamente mío y debo decir que en efecto hizo lo que esperaba. Ahora con decks como dredge, project x, slivers y Dios sabrá que mas, a veces la mesa está llena de bloqueadores y lo que yo quiero es facturar 5 daños y cerrar el partido. El plan salió tan perfecto que tenía ganas de fumar un puro con mi mejor cara de John "Hannibal" Smith.

Y me pareció justo que el premio FNM de un deck aggro sea una carta aggro.

Saturday, March 31, 2007

¡Que bonita vecindad!

Es la vecindad del Chavoooooo, nunca vale ni un centavoooo, pero es linda de verdad!

Aaah, y que carajo tiene que ver el Chavo con un blog de Magic.

Bueno el Chavo es, de forma más amplia, el Chavo del 8. Y 8 es mi número favorito.

Bueno, interesante, y?

8 Ya es un número, ya tiene relación con magic, 8 vidas, 8 de ataque (Myojin verde, alguien?), 8 de defensa (wall of shards? no?), 8 de casting cost.

DING!!

Hoy descubrí que dos de mis criaturas favoritas de magic cuestan, usted lo adivinó, 8 manas. Y eso que tengo muchas criaturas favoritas -wild mongrel, radkos guildmage, magnivore, eternal witness, stuffy doll, mogg fanatic, broodstar, etc, etc, etc- pero ese costo prohibitivo, ridículo y poco profesional de 8 parece ser, al menos en ocasión, una puerta a un auténtico valhalla de poder magic.

Así que mejor les cuento mis experiencias en los últimos torneos desde la perspectiva de los protagonistas, mis nuevos avatares, los héroes de 8 manas!

Final de tu turno...

Ser una criatura de 8 manos es un trabajo difícil, lo reconozco, pero cuando uno va a pagar 8 manas por algo, al menos debe asegurarse que vale la pena, permítanme mi credencial:


WASUUUUUUUUP!!!!!

Y bueno, la perspectiva de bajarme "a pedal" no es muy seria, por eso necesito saltar un par de vallas y comandar un par de truquitos para aparecer en escena. El primero de dichos trucos fue Dragonstorm, con el cual no asomaba solo, sino que traía 3 más de mis cuates, y bueno, 4 *5=GG.

Pero ahora aparezco en un nuevo arquetipo, Izzetron, el bueno y viejo, si, un deck caprichoso, temperamental y poderoso..como yo!

Así que el buen Mario decidió llevarme a mi y a mi ñaño en su flamante Izzetron, el cual hasta este punto es básicamente una fiel copia de mi más reciente aparición en el glamour internacional en GP Kyoto, ganando el torneo comandado por Yuura Watanabe, siendo la única excepción que el original corre 3 de mis congéneres mientras que Mario sólo tenía disponibles 2. En cualquier caso habrá que hacer un par de ajustes para el metajuego local, pero parezco tener futuro a pesar de todo.

El primer partido nos toca contra otro visionario jugando Izzetron, don Buda. Y los respectivos juegos siguen el argumento predefinido para tales situaciones, lo cual llevó a un inevitable empate.

El carácter caprichoso de la baraja aparecería en el primer partido siguiente, contra un chico que apenas empieza a entender los fundamentales de la competencia de torneo -ok, todavía no los entiende, vale?- pero es buen tipo y esperamos que mejore. A pesar de lo cual su baraja escupió unos pocos bichos y la nuestra pataleó por varios momentos hasta poder estabilizar al precario total de 4 vidas de nuestro lado, y por supuesto, aparecí en el momento indicado!

Ok, tener una criatura 5/5 que vuela desestabiliza la mesa, que esa criatura elimine a la gran mayoría de la armada oponente es bastante más desequilibrante, pero el hecho de causar ese desbalance a final de turno, con la mana destapada en el nuestro y conmigo listo para quitarle la 4ta parte de su vida al oponente, ESO es poder por 8 manas.

Y claro, el otro MVP del deck es mi compadre, el Sulfur Elemental. Counterspells? Bah, Savannah quien? Soltari cual? Martyr of what? Ese flaco arruina la mitad de los combates y bajarlo contra control en múltiples es poco menos que absurdo, ay si pudiéramos jugar con 8...

En fin, lo único que nos detuvo fue un extraño deck de control que además parecía tener la fortuna de tener una plaxmanta para cada uno de los sulfurs. Es más, el último partido, mi presencia o la de un repeal hubiera hecho un partido distinto.

Una victoria, un empate, dos derrotas contra el mismo deck. Difícil de tragar, pero creo que el jefe ya se encariñó ^^, me pregunto si habrá algún antecedente para ello...

Sundering Tempo, um, Titan.

Como dice el novato, 8 manas es un costo difícil. Te cambian mal al salir la edición, te miran como a basura de carpeta, te guardan para los decks casuales, y claro, es desde esa trinchera cuando nosotros, los Titanes, nos levantamos.

Cuanta debe haber sido la satisfacción del primer jugador casual que pagó 8, me bajó y transformó un duelo en una carnicería.

Y desde esas arenas un Francés de buenos oficios me incorporó en una baraja -como sideboard al principio en el Twelvepost de Gabriel Nassif, el cual quedó segundo ante un indetenible Kuroda con su Big Red. Oh, lo que le hubiera hecho a esas montañas...

Pero luego me movieron al maindeck, con affinity desapareciendo del escenario de standard, y más gente empezó a comprender la absoluta brutalidad encerrada en este cuerpito tropical:


Sr. Tempo, también conocido como "papá de las nenas"

Que el oponente pierda al menos una tierra -si no es que 3 o 6- es buen tempo.

Que la mesa se incline del lado del 7/10, es buen tempo.

Que la misma carta haga AMBAS COSAS a la vez....

Tal vez me ganes si bajo, pero seamos realistas compadre, no parece muy frecuente.

Mi pequeño secreto es este: El verdadero héroe de Tooth & Nail soy yo señores. Hasta antes de la llegada del advenedizo de Sky Hussar, el 90% de los juegos de Tooth terminaba conmigo en la mesa, pero no es solo eso. Una de las estrategias para derrotar a esa máquina de matar llamada Tooth and Nail era remover quirúrgicamente dicha carta por medio de remoción dedicada -lobotomy, cranial extraction, extirpate, algo así. Y la mayoría de tooths de ese entonces en efecto perdían sin dicha carta.

Terry Soh ganó un invitacional en el cual le llovieron los persecutes, los cranials y las ratas, y lo hizo porque en maindeck tenía 2 de mí. Kai Budde le hizo cranial, persecute...y perdió.

Un deck que ganaba a pesar del odio exhibido por sus oponentes. Mario estaba atento, y en el espíritu de Terry Soh, redefinió el juego de Tooth and Nail para hacer no un tooth rápido -como se había puesto de moda- sino el tooth más estable que pudiera diseñarse. Y el resto fue historia. El campeonato del 2005 no fue fácil, pero la construcción, la estabilidad y la confiabilidad de su titánico servidor hicieron el trabajo.

Ahora me volví a juntar con el equipo para jugar extended, y debo reconocer que no me fue nada mal, gané todo y sólo empaté con otra baraja igual, la cual ganó por tiebreakers, debo reconocer que al negrito le tocaron en suerte oponentes más difíciles. También reconozco lo placentero que fue mostrarle mis poderes a gente que nunca me había visto hasta hoy, y que nunca más me volverá a olvidar.

---Pequeña infiltación Goblin--

HOOOLA NIÑOSSS.... Soy KIKI JIKIIII. Yo no necesito convencerles de que soy bueno, aunque para ser realmente bueno me tenga que juntar con uno de los gorilas antes mencionados.

Este pequeño corto es para contarles como hoy gané el último partido en ambos juegos y por la misma jugada, después de que mi socio, Mr. Titán, controlara a mi oponente dejándolo en modo de topdeck, yo esperaba ansioso la oportunidad de bajar al juego y terminar con la payasada, pero el tooth no salía y no salía. Y entonces mi oponente bajó un muy interesante personaje.

Kiki luvs Iwamori
Así es, no fue placentero para el dueño de Iwamori. El cual entró en fase de recogida y barajada.

Y en el segundo partido Mario tuvo el buen tino de ejecutar un mindslaver y romperlo. La mano del oponente la verdad no se veía muy prometedora, hasta cuando el buen y viejo Iwamori salió del topdeck.

Y para confirmar la puntería de nuestro pobre amigo, cuando lo bajó contra affinity (affinity! de todos los decks del universo) creerán que un Mishra entró al juego???

Pobre Iwamori...